Combina distintas terapias con diagnósticos y tratamientos propios. La medicina china puede ayudarnos en todos aquellos procesos en los que queramos no sólo un alivio sintomático sino profundo tratando enfermedades endocrinas, metabólicas, ginecológicas, dermatológicas y psicológicas; como alteraciones del sistema cardio-circulatorio, respiratorio, urogenital e inmunitario.
Acupuntura: actúa mediante la inserción de agujas muy finas en precisos puntos, actuando sobre el sistema energético (meridianos) para equilibrar el flujo vital de todo el cuerpo. A la acupuntura se asocian otras técnicas como la moxibustion o las ventosas.
Fitoterapia y dietética energética: la farmacopea china utiliza la sinergia de las energías y de los sabores de cada materia prima (mineral, vegetal y animal) para armonizar y reforzar el ser humano en su totalidad.
Qigong: es el arte de unificar las fuerzas del cielo y de la tierra dentro de tu cuerpo, utilizando ejercicios físicos y mentales que combinan la respiración, el movimiento físico, la concentración mental y la meditación. Permite aumentar la energía vital, afinar la conciencia, promover la salud y tratar enfermedades.
Tuina: masaje utilizando diferentes técnicas manuales para regular las funciones fisiológicas y liberar la circulación de la energía y de la sangre. Trata lesiones de traumatología como de medicina interna. Una terapia ideal para los niños.
La medicina china puede ayudarnos en todos aquellos procesos en los que queramos no sólo un alivio sintomático sino profundo para fortalecer la salud, prevenir la enfermedad y restaurar nuestro equilibrio.
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